lunes, 31 de agosto de 2020

1 DE SEPTIEMBRE DE 2020 : CONSIDERACIONES DESPUÉS DE SEIS MESES DE NO PODER DISFRUTAR DE LA COMPAÑÍA DOMICILIARIA DE NUESTRO HIJO DAVID, EN EL DIA DE SU 43 ANIVERSARIO.



David, en la Residencia La Pineda, de Terrassa.
                     (20 de agosto 2020)

En primer lugar, un beso y fuerte abrazo virtual desde la distancia David, con motivo de tu 43 aniversario, que por primera vez no podemos celebrar en tu compañía a causa del coronavirus, que tanto sufrimiento y angustia está incidiendo en nuestras vidas.

Dentro de unos días se cumplirán seis meses -- medio año -- que el sábado, dia 7 de marzo, de regreso a la Residencia La Pineda, después de haber pasado una agradable jornada en el domicilio familiar de la Garriga, como todos los sábados y fiestas señaladas del año, nos despedimos con un beso en cada mejilla y un abrazo y nos emplazamos, como de costumbre hasta el próximo sábado. Pero ya no ha habido próximo sábado desde entonces. Al decretarse el estado de alarma, de forma repentina e inesperada,  por la aparición del Covid-19,nos confinó a todos en nuestros respectivos domicilios, y asi, al igual que todos los usuarios y usuarias de los servicios asistenciales de la Residencia La Pineda, permaneces para protegerte, en lo posible del contagio del temible virus, y así va transcurriendo el tiempo, con unas perspectivas de futuro que no son precisamente favorables para mejorar la situación en general, y en consecuencia no hay nada, absolutamente nada, que ocupe en mi vida más espacio que la ausencia de  no poder disfrutar los sábados de cada semana de tu compañía en el domicilio familiar. Y esta prolongada ausencia genera tanta tristeza, angustia, opresión y sufrimiento dentro de mi, que siento como se está agrietando y debilitando esta frágil línea que separa la razón de la locura.

Las lágrimas son palabras que deben de ser escritas, y tal vez por este motivo cuando lloramos, es porque nuestros labios no pueden expresar los nobles sentimientos de tener el corazón destrozado.

Suelo pasar largas  horas del día intentando por todos los medios a mi alcance, superar este estado anímico que me invade, y considero que con el tiempo transcurrido debiera de haberlo superado. Pero no es así. Es más, todavía me sigue atormentando con más fuerza y con mayor intensidad.

RECONOCIMIENTO 

Hay un momento en el día, que experimento una cierta alegría, un paréntesis a tanto sufrimiento. Es cuando contacto telefónicamente con la Residencia La Pineda, de Terrassa, acogiéndome al ofrecimiento de que podemos contactar con ellos tantas veces como podamos desear. Pregunto si existe alguna novedad, y hasta el día de hoy, la respuesta siempre es la misma. Están todos muy bien. Ningún contagiado.

Consecuentemente, sería injusto por mi parte poner fin a estas líneas sin antes reconocer la meritoria y eficaz labor que, desde el primer momento han desarrollado, con decidida voluntad y profesionalidad, la gran familia que componen la amplia gama de trabajadores y trabajadoras de la Residencia La Pineda, consiguiendo que las personas que asisten estén libres de contagio.

Los padres y tutores sabemos que podemos llamar telefónicamente siempre que tengamos necesidad de ello, para recibir las informaciones que podamos precisar, al tiempo que nos envían, con frecuencia, fotografías y vídeos de nuestros hijos e hijas.

Son detalles que mucho agradecemos, atendido que en definitiva suponen momentos de alegría y satisfacción de los que tan faltos estamos de ello, debido a esta prolongada y necesaria confinación para protegerles del temible Covid-19

6 comentarios:

  1. Querido Joan
    En la vida pasas cosas positivas y otras negativas, pero ambas van cogidas de la mano con un solo fin. Hacernos crecer como persona para aprender a saborear la vida.
    No se podría valorar lo dulce del azúcar, sin haber probado la sal.
    Nunca pasan las cosas porque sí, siempre hay un porque que desconocemos que nos lleva a una meta inesperada.
    Circunstancias negativas suelen desembocar en algo positivo que no teníamos planeado.
    Si analizas con rigor y aparcando a un lado los sentimientos, podrás comprobar lo cierto de esta apreciación.
    Un ejemplo muy común en la sociedad. La muerte de unos padres es un trauma sentimental para la familia, pero su vida de lucha les ha permitido dejar una herencia, grande o pequeña, qué al materializarse, ha podido ser un balón de oxígeno para esos hijos que estaban en situación económica límite, su muerte ha salvado a sus hijos.
    El impedimento de poder abrazar a tu hijo parece la parte negativa, pero la muy positiva es que, en un momento tan peligroso, el confinamiento os esta protegiendo a todos vosotros.
    Imagina una gran riada en la que tu hijo está en la otra orilla, siendo imposible llegar a vosotros por bajar el río de forma arrasadora. Si tu ves a tu hijo subido en una plataforma segura, lo único que debes de esperar, es que el río pierda su furia y vuela a fluir con serenidad.
    No pierdas de vista a tu hijo mientras esta en la otra orilla, pero siente con Amor poder verlo seguro subido en esa plataforma, si él te ve tranquilo, sabrá esperar, haz tu lo mismo.
    Hoy por hoy, la tecnología nos acerca mucho más, desde un simple teléfono podemos vernos y hablar por vídeo conferencia, como si estuviéramos juntos, aprovecha y disfruta esos momentos, como cuando disfrutas cogiendo tu pluma para escribir y compartir tus conocimientos o sentimientos.
    Con todo mi cariño a ese niño que vi de bebe en vuestros brazos, aunque no le llegue mi abrazo físicamente, te puedo garantizar que le llegara, aunque solo sea en el placer de una cucharada de un postre, ahí estará mi abrazo, para que él lo pueda disfrutar.
    FELICIDADES DAVID

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchas gracias Carlos por tus acertadas -- como siempre -- palabras. Muy cierto lo que dices, que lo entiendo perfectamente y son los planteamientos que vengo haciéndome, pero hay algo muy superior que me impide serenarme. Solamente el esfuerzo y el trabajo que están haciendo en la Residencia La Pineda, es más que suficiente para valorar que todos los usuarios y usuarias de aquel establecimiento están protegidos del contagio, pero no consigo superar la tristeza que llevo dentro de mi, a pesar de que sigo intentándolo.

      Muchísimas gracias una vez más Carlos. Ciertamente los verdaderos amigos se encuentran en los momentos difíciles y en las circunstancias adversas, aunque en tu caso, no tengo la menor duda de que eres un muy buen amigo. De los que no hay.

      Eliminar
    2. Querido Joan, la vacuna está llegando, igual que se acerca el día de ese abrazo, solo tienes que hacer un último esfuerzo para subir esa cuesta hasta la cima, para ver un nuevo horinzonte donde tu camino de vuelta, será todo el en bajada. Un abrazo con palabras, que estoy seguro te sientan igual de bien que uno físico, porque si cieras lo ojos y abrazas a tu mujer, podrás sentirlo como si fuera mío, haz lo mismo pensando en David, ese abrazo será más valido que el mío, porque lleva la misma esencia el hijo que la madre.

      Eliminar
    3. Dios quiera que se cumplan tus buenos deseos Carlos.

      Eliminar
  2. PER MOLTS ANYS! família, els anys passen que volen i nosaltres amb ells. Ho sento que no haveu pogut abraçar els vostre fill David, rebeu quaranta-tres abraçades de tot cor. jrrof

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Moltes gràcies Josep. Espero que aviat ens tornarem a veure a la Plaça del Silenci, de retorn de les seves vacances, que espero resultin prou profitoses pel descans i en contacte amb la Naturalesa. Una forta abraçada.

      Eliminar