El Padre Benito Menni, a los pocos días de su llegada a Barcelona, para restaurar la extinguida Orden de San Juan de Dios.
Para la delicada misión de restaurar la extinguida Orden de San Juan de Dios en España, el Superior General, Padre Juan María Alfieri se había fijado en un joven Hospitalario nacido en el año 1841 en la ciudad italiana de Milán, y bautizado el mismo día de su nacimiento, el 11 de marzo, con los nombres de Ángel Hércules, y que a los 19 años de edad ya vestía el hábito de San Juan de Dios, y que desde su ingreso se había distinguido por sus estudios y la práctica de la cirugía. Pensando que podría seguir con eficacia la carrera sacerdotal, fue destinado a la ciudad italiana de Lodi, que disponía de seminario, y podría cursar allí las necesarias disciplinas eclesiásticas, siendo ordenado sacerdote en el año 1866, al tiempo que obtenía la superior dispensa para obviar el impedimento canónico de haber ejercido la práctica de la cirugía.
El deseo del Padre Menni de ser útil a la Orden, ya lo había puesto de manifiesto con anterioridad, antes de ser sacerdote, después de haber emitido los votos solemnes, en el año 1864. Se había ofrecido al Superior General para ser destinado a cualquier empresa en que pudiera resultar útil, con la finalidad de practicar la santa hospitalidad.
El Padre Alfieri estuvo vacilante en enviarle a Hong-Kng, donde los misioneros pedían la fundación de una casa de su instituto, para la asistencia de los enfermos, o, en su lugar, a España, para intentar restaurar la extinguida Orden de San Juan de Dios.
Parece ser que el Padre Juan María Alfieri consideró más transcendente la misión del Padre Menni en España, coincidiendo también con este criterio el Papa Pío IX, y en consecuencia, el 22 de noviembre de 1866, el Santo Padre recibió en audiencia al Padre Benito Menni, que acudió acompañado del Prior General de la Orden, recibiendo en el transcurso de aquella audiencia, palabras de aliento y su bendición.
Y no habían transcurrido todavía dos meses cuando, el 14 de enero de 1867, en el transcurso de otra audiencia pontificia a los mismos protagonistas, el Papa Pío IX puso sus manos sobre la cabeza del Padre Benito Menni y le encomendó con estas palabras: "Hijo mío, vete a España con la bendición del Cielo a restaurar tu Orden en su misma cuna, y con aquellos que el Cielo te depare para compañeros en el cumplimiento de esta misión lleva vida perfectamente común, muy pobre, muy casta, muy obediente".
Y fiel a la obediencia, dos días más tarde el Padre Menni salió de Roma, permaneció unos días en Milán y después se dirigió a Lyón (Francia) para empezar a estudiar la lengua española con la ayuda del Hermano Juan de Dios Bramón, hasta el 26 de febrero, en que se trasladó a Marsella, donde tuvo ocasión de comprobar la conducta ejemplar de los Hermanos de su Orden en aquella comunidad y la fidelidad al carisma hospitalario.
IMPACIENTE ESPERA DEL PADRE MENNI EN BARCELONA
Barcelona no conocía, en aquella época, a los religiosos de la Orden de San Juan de Dios, atendido que los Hermanos establecidos en la península con anterioridad, no pasaron de Molina de Aragón, en la provincia de Guadalajara.
Sin embargo, el Prior General de la Orden, Padre Juan María Alfieri, tenía buenos amigos en la Ciudad Condal, y de ahí que fuera precisamente Barcelona, el lugar de llegada del Padre Benito Menni a España para la restauración de la Orden.
Un buen ejemplo de ello lo tenemos en la carta que la esposa de don Nonito Plandolit Matamoros, la señora O'Daly, le escribiera en estos términos:
"Al reverendo Padre Alfieri, General de la Orden de San Juan de Dios.
Mi estimado Padre:
En este momento acaba de recibir Nonito la carta de 26 pasado que nos dirigía a los tres, y como no tiene tiempo de contestarle hoy, por sus muchas ocupaciones, me encarga a mi de hacerlo. Parece imposible que no le haya escrito antes agradeciéndole los pocos días que Dios nuestro Señor nos concedió pasase en nuestra compañía dándole fuerzas, con sus cariñosos consuelos, para soportar el golpe más duro que podría recibir mi alma.
Nonito espera de un momento a otro, a su recomendado, pero todavía no sabemos nada de él, ni tampoco del P. Blanquet que lo saluda afectuosamente.
Yo le suplico un recuerdo en sus oraciones para mi inolvidable Pedro, para mis hijos y para mi, que tanto necesito los divinos auxilios...
O'Daly de Plandolit".
Don Nonito Plandolit, en una carta de cuatro páginas de extensión, fechada el día 5 de abril de 1867, escribió al Padre Juan María Alfieri para hacerle llegar su gratitud " por los favores recibidos últimamente", y en uno de los párrafos explicaba que " ya tenemos preparada la habitación para el Padre Menni, si bien no es como él se merece, sin embargo suplirá nuestra buena voluntad; pero aún no ha llegado, a pesar de que me escribió desde Marsella que llegaría anteayer, 3 del corriente. Haremos lo posible para complacerle y nos pondremos a sus órdenes como con usted; a pesar de nuestro vivo deseo de tenerle el más tiempo posible a nuestro lado, le dejaré ir con el Padre Cargol, refiriéndose al Hospital de la Santa Cruz, cuando él crea conveniente. Mucho me alegraría viniese también el buen Bramón como usted decía".
Como vemos se desprende que el Padre Benito Menni era esperado en Barcelona, en el domicilio de los señores Plandolit, el día 3 de abril de 1867, y sin embargo, el día 5 del mismo mes, todavía no había llegado, por lo que nuevamente la señora O'Daly, esposa de don Nonito Plandolit, escribió al Padre Alfieri con fecha 6 de abril en estos términos: " Aún no ha llegado el Padre Menni, pero lo esperamos D.M...."
En el momento, en que la señora O'Daly se disponía a cerrar el sobre que contenía esta carta, se produjo la llegada del Padre Menni. Tras los saludos de bienvenida, don Nonito Plandolit abrió el sobre, extrajo la carta de su interior, y añadió en francés:
" 6 de abril. Dans ce moment vient d'arriver le père Menni ".
Así de esta manera, queda documentalmente probado que el día 6 de abril de 1867, el Padre Benito Menni llegaba a España, por Barcelona, y se hospedó en la casa de la familia Plandolit aquella noche. Es ciertamente una fecha histórica porque marca el inicio de la restauración de la Orden de San Juan de Dios en España.
PROCEDENCIA:
Vendrell Campmany, Joan. "150 aniversario de la inauguración de la primera casa de la restauración de la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios en España. (14 de diciembre de 1867). Archivo Hospitalario. Revista de Historia de la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios. Número 15. Año 2017. Páginas 297 a 301.
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