Los adolescentes , en número de cinco o seis, viven en pequeños apartamentos que disponen de comedor, baño y cocina
(Foto: Ana Jiménez)
Adolescentes con trastornos graves y complejos de ambos sexos, con vidas muy difíciles por sus problemas de salud mental y por no haber tenido la atención experta adecuada, han sido los primeros en estrenar el nuevo centro, pionero en España por su enfoque, atender de forma integral e intensiva estos trastornos que afectan al conjunto de su existencia. El objetivo es que puedan proyectar su propia vida entre los demás.
Este nuevo centro está constituído por un conjunto de apartamentos con salas, patio y miniescuela, donde conviven en estos momentos 16 adolescentes, si bien tiene capacidad para 28, en pequeños grupos. Están ubicados en una zona del Monasterio de Valldonzella, de Barcelona, y ha sido creado por los departamentos de Salut y Afers Socials de la Generalitat de Catalunya, y lo gestiona el equipo de Salut Mental Infantil de Sant Joan de Déu.
"ACOMPANYA'M": UN CENTRO CON UN ENFOQUE INTEGRAL.
Responde al nombre de "Acompanya'm" "atendido que los trastornos graves y complejos precisan de una intervención que lo tenga todo en cuenta. Se necesitaba un espacio donde pudieran vivir, al tiempo que reciban una atención intensiva y partiendo de un buen diagnóstico" explica Montserrat Dolz, responsable de Psiquiatría Infantil y Juvenil de Sant Joan de Déu.
La mayoría de los adolescentes que pasan unos meses en "Acompanya'm", llevan un largo recorrido de atención inadecuada. "Una patada a una silla no es lo mismo en un chaval enfadado que en un chaval con esquizofrenia. A este no le valen planteamientos meramente educativos que sí le sirven al otro", explica María Ribas, directora del Centro. El enfoque aquí es integral, pero dirigido por el equipo de Salud Mental.
" Es un hogar, no un hospital, porque queremos evitar la institucionalización de estos adolescentes", destacó la Consellera de Salut, Alba Vergés, el día de la presentación.
"En los centros de justicia juvenil en los que participamos, vemos cómo casi siempre llegábamos tarde. Chicos y chicas de 15 años con tratornos graves que sin intervención acaban en una espiral que les lleva hasta la justicia: el 30%",explica María Ribas. El porcentaje se repite entre los adolescentes tutelados por Infància ( la Dgaia): el 30% tiene un problema de salud mental, una prevalencia muy superior a la población general.
El trastorno no identificado y no tratado adecuadamente va generando problemas de conducta en la escuela, en la calle. Y muchas familias dimiten. No saben cómo afrontar la situación y piden la intervención de la Dgaia. Por eso muchos de los nuevos inquilinos están en esta situación. Así que no hay familia ni casa a la salida. "Sea cual sea su escenario, les acompañamos en el siguiente paso: trabajo, estudios, domicilio familiar, centro de la Generalitat. Seguimos", aclara Montserrat Dolz. El equipo de 45 profesionales del centro pionero también se ocupa de ese tratamiento en el domicilio, sin olvidar a las familias ni a los centros de menores donde muchos tendrán su casa.
En Catalunya acuden a un centro de Salud Mental más de 65.000 menores al año, y uno de cada ocho, tiene un trastorno grave.
