jueves, 20 de marzo de 2014

UN NIÑO CON AUTISMO EVITA QUE UN PERRO SEA SACRIFICADO, Y EL CAN LE HA DEVUELTO LA ALEGRÍA.

Rob y su inseparable perro Jack (Foto : Schnauzi.com)

Rob es un niño con autismo de siete años de edad que ha protagonizado, con Jack, un perro abandonado y acogido en el Central Oklahoma Humane Society, una bonita historia de amistad, en la que ambos se compaginan y cubren sus mútuas carencias. Es en definitiva una relación de ayuda y cariño que los hace inseparables.

Según  ha informado un medio de comunicación social (1) , "Rob es un niño de siete años que padece autismo. Su familia ha estado buscando el amigo perfecto para el pequeño. Un compañero de juegos que le ayudase con sus problemas de comunicación con el mundo exterior, y lo ha encontrado con este perro, mezcla de teckel que se llama Jack y que fue abandonado en el  "Central Oklahoma Humane Society".

El perro iba a ser sacrificado si no fuese porque uno de los cuidadores del centro descubrió su ternura, y empezó a buscar una familia para él, hasta que llegó Rob. Ambos conectaron desde el primer momento, y desde entonces son inseparables.

La familia del pequeño dice que, aunque Rob no puede comunicar sus emociones, ellos sienten su evolución y ven cómo ha superado el miedo a los otros perros".

(1) antena3.com  Miércoles, 19 de marzo de 2014

2 comentarios:

  1. Esta maravillosa historia es fácil de comprender para los que amamos los animales, sabemos la complicidad que nos brindan estos canes, yo personalmente he tenido perros toda mi vida y no concibo esta sin ellos, son una aportación sentimental compartida que crea un vínculo inseparable, ellos no discriminan por credos, razas o estatus social, ellos lo dan todo sin más, tienen la habilidad de leer nuestro aura. Ese Niño encontrará a un compañero que le entenderá sin palabras.
    Un perro no es un juguete, es un ser vivo que te hará compartir sentimientos....pon un perro en tu vida y como Rob podrás compartir tu mundo...sea el que sea.

    Gracias Joan por compartir esta nocticia.

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  2. Muy acertado tu comentario Carlos. Solamente las personas que tenemos o hemos tenido la suerte de compartir los quehaceres diarios con un perro, sabemos lo que significa en cuanto a lo enriquecedor
    que resultan estas vivencias. Algunos hospitales psiquiátricos y residencias para personas con discapacidad están incluyendo, en sus terapias con las personas asistidas, la presencia de estos dóciles y encantadores animales, con resultados altamente satisfactorios.

    Un abrazo muy fuerte, Carlos.

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